World Triathlon

Con una temperatura de 31º y ante una multitud de espectadores ansiosos por ver a su atleta elite favorita, el clima en Ginebra era electrizante.

Las atletas británicas Lucy Hall y Jessica Learmonth aprovecharon su potencia en el agua. Ubicándose al frente del pelotón, lograron abrir una brecha que las llevó a la T1 con comodidad. Tres atletas se sumaron al inicio de la segunda disciplina pero el ritmo de las atletas de Gran Bretaña fue tan tenaz que las dejaron atrás, una a una.

A sus espaldas, Nicola Spirig (SUI), Lisa Nordén (SWE), Annamaria Mazzetti (ITA), Ainhoa Murúa (ESP), Jodie Stimpson (GBR), Margit Vanek (HUN), Zsófia Kovács (HUN) y Jolanda Annen (SUI) se afanaban por alcanzarlas.

Stimpson tuvo un desperfecto mecánico en la bicicleta que la obligó a dejar el grupo. Las dos británicas presionaron demostrando gran fortaleza y determinación. Recién en la última vuelta en bicicleta pudieron alcanzarlas.

El pelotón dejó atrás algunas de sus integrantes y pronto las líderes con Spirig, Nordén, Mazzetti y Murúa estuvieron a la vista. Pero Norden debió cumplir una pena de 15 segundos por arrojar basura en el circuito de ciclismo.

Al dejar la T2 Spirig aceleró y logró una ventaja de 20 segundos que mantuvo durante los primeros 5 kilómetros. En la segunda mitad del trayecto subió la velocidad y dejó la lucha por la plata a manos de Mazzetti y Murúa.

Los espectadores suizos la alentaban entusiasmados mientras una sonriente Spirig se quedaba con el oro y daba el triunfo a su país.

Mazzetti nuevamente ganó una medalla en un Campeonato Europeo, en esta ocasión la de plata que superó el bronce de 2014. Ainhoa Murúa fue tercera para deleite de los muchos españoles cuyos vítores eran tan ruidosos como los de los italianos presentes.